Crecí viendo tejer a mi abuelita, todos los días. Le ha regalado una carpeta a cada uno de sus 32 nietos, a todos sus hijos y a cuántas personas más!!! Estoy segura que muchas de mis lectoras tienen la misma experiencia, ese ejemplo silencioso de una abuela o una madre tejedoras, que hacían arte cotidiana y amorosamente.
Hoy te comparto algo similar a lo que ella hacía, con su correspondiente patrón. las imágenes se han publicado pequeñas pero puedes ampliarlas dando click sobre cada una.
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